La cultura y la sociedad en la educación ambiental - Sesión 1

 Por:

Lina Maria Barrios Jimenez 

La educación ambiental es un proceso permanente en el cual los individuos y las comunidades adquieren conciencia de su ambiente, aprenden los conocimientos, los valores, la experiencia y la determinación que les capacite para actuar, individual o colectivamente, en la resolución de problemas ambientales, tal como se define en la propuesta del congreso de Moscú de 1987.

Actualmente, la sociedad enfrenta un  deterioro ambiental, el cual ha conllevado a la   replantación de  la vinculación de la sociedad con su entorno natural, mediante un desarrollo sustentable, y reconociendo la existencia de límites al desarrollo social, al crecimiento económico (productivo) y a la explotación (abuso) de los ecosistemas, dado el estado actual de la tecnología, la organización social y la capacidad de la naturaleza para absorber los efectos de las actividades humanas.

A su vez, la educación ambiental  es un asunto de todos y para todos en la sociedad, pues ella brinda un pensamiento crítico e innovador que a su vez fomenta  la construcción de opiniones acerca de los problemas socio- ambientales. A través de ella, se pretende desde las grandes cumbres hasta los trabajos aislados e individuales de un determinado grupo, contribuir al cambio social y  cultural, y así favorecer al mejoramiento y desarrollo de la calidad de vida, la recuperación, la conservación y la protección del medio ambiente.

A saber, los problemas ambientales que enfrenta el planeta Tierra se han generado por la forma en que los seres humanos pertenecientes a una sociedad, se han relacionado con el entorno. Con el tiempo, se ha deteriorado la estrecha y armónica vinculación entre el hombre – naturaleza. Nuestra generación es testigo  del avance tecnológico  que posee y sigue desarrollando nuestra humanidad, y es que tal avance ha aportado grandes beneficios a muchos sectores de la sociedad desde su cultura, pero a su vez, ha generado consecuencias negativas a nivel social y ambiental, como el fortalecimiento de la desigualdad entre los sectores o clases sociales, o incluso entre países. Y es que, la pobreza dificulta el acceso a la educación y de cualquier otro servicio social, la falta de educación, de cultura y de conocimientos aumenta el crecimiento demográfico,  y ello degrada el medio ambiente, ya que a mayor población mayor demanda de recursos.

De ahí, surge la necesidad de irse hasta los procesos educativos, estos como formadores de individuos que deben adquirir una cultura ambiental sostenible por medio de la promoción y adopción de modos de vida que estén relacionados con la sostenibilidad ambiental, a través de una adecuada exploración, explotación, utilización y manejo de los recursos naturales. Puesto que, el impacto del hombre sobre el medio ambiente ha crecido con el curso de los días, viéndose alterados los sistemas ecológicos, al poner en peligro las supervivencia de plantas, animales y del mismo ser humano.

Al hablar de educación ambiental surge la necesidad de aclarar que las cuestiones ambientales no es exclusividad de las ciencias naturales, por lo cual salen dos conceptos ligados a la educación ambiental: transversalidad y transdisciplinariedad, esta última hace referencia a que los temas ambientales pueden ser tratados a través de todas las áreas y la primera se refiere a la diversidad de enfoques transdisciplinarios con los que puede ser tratado un mismo tema ambiental, en este caso. Por ejemplo, los contenidos educativos que forman parte del currículo de una institución y los cuales abordan conocimientos, actitudes y  valores hacia la realidad y los pro y contra de los adelantos tecnológicos son un tema transversal que se refiere a la educación ambiental.

En conclusión, al hablar de sociedad y cultura, también se habla de ambiente, específicamente de los procesos de interacción entre el hombre y la naturaleza, pues es esta última la base del desarrollo económico de un país y la materia prima para la sostenibilidad y la calidad de vida del primero.

Y es la educación ambiental, la que puede contribuir a la mitigación de la solución de problemas ambientales, pues su relevancia se basa en que esta es congruente con las condiciones ambientales, sociales y culturales de una determinada comunidad objeto de estudio, pues las comunidades tienen características similares, pero a la vez presentan necesidades diferentes y por ende, sus problemas son distintos.